Fin de curso. ¡Esta vez espeleología!

El sábado 26 de junio, Pablo, María y Nacho estupendos espeleólogos de La Escuela Asturiana de Espeleología y Cañones, nos llevaron a conocer una magnífica cueva llamada “Pando” muy cerca de Ribadesella.

Alberto, Teca y sus amigos no nos dejaron solos, como en anteriores ocasiones, nos acompañaron en la actividad. Pasamos una tarde estupenda, pero eso mejor lo contarán Miguel, Arturo, Cristina, Karen y Kevin que fueron los protagonistas de esta experiencia donde dieron  los primeros pasos en espeleología.

Mientras tanto los familiares tuvieron la paciencia de esperarnos cuatro horas paseando por el bonito pueblo de Ribadesella.

Al final de la actividad nos otorgaron un diploma del que no quedamos exentos los profes que también superamos con creces la actividad.

Aquí están las primeras fotos, a la espera de que los protagonistas os relaten con detalle la aventura.

Miguel se acercó esta mañana por el hospital a traernos las fotos realizadas con su cámara. Para verlas pinchar el la foto. ¡Están preciosas! La funda quedó unpoco embarrada pero mereció la pena.

ESPELEOLOGÍA

¿Sabes dónde está la Colluvina? ¿Y sabes lo que es un “gour” y que existen caracoles carroñeros?

A estas y otras preguntas nos dieron respuesta el pasado domingo, cuando tuvimos ocasión de adentrarnos en el mundo de la espeleología. Gracias a un montón de expertos de Gorfolí,  el Diañu Burlón y la EAEC (Escuela Asturiana de Espeleología y Cañones), Alex y unas cuantas profes de AAHH tuvimos la oportunidad de conocer el interior de la Colluvina, una cueva situada en el concejo de Llanes. Nos pusimos un casco con luz frontal, cual mineros, y empezamos a descubrir las maravillas que aquella cueva albergaba en su interior.

Siempre pendientes de dónde poníamos el pie, recorrimos galerías impresionantes y disfrutamos de infinidad de estalactitas y estalagmitas que aparecían ante nuestros ojos cuando, tras arrastrarnos por el suelo como auténticos profesionales, conseguíamos ponernos de pie y alzar la mirada.

Conocimos al caracol carroñero (caracol Nasarius) que se alimenta de materia orgánica en descomposición y suele vivir en las cuevas, y supimos también que un “gour” (palabra de origen francés) es una especie de formación que se produce en el interior de las cuevas y que viene a ser como una pequeña represa donde se acumula agua y en cuyo interior quedan sedimentos en forma de perlas.

Como veis, aprendimos un montón de cosas pero, sobre todo, disfrutamos un montón de la aventura y la compañía. Fue una experiencia muy grande ¿verdad, Alex?

¡Esto hay que repetirlo!